Microsoft está planeando una nueva dirección radical para su Xbox de próxima generación, según informes. Se espera que la nueva consola ejecute una versión completa de Windows alrededor de 2027, transformándola en un híbrido de PC y consola capaz de acceder a tiendas como Steam.
En un movimiento histórico, Microsoft también planea eliminar su tarifa de larga data por el modo multijugador en línea. Se informa que su giro estratégico es una respuesta directa a la intensa presión corporativa.
Las fuentes afirman que la división Xbox debe lograr ambiciosos márgenes de ganancias del 30%, lo que la obligará a abandonar la exclusividad de la consola y buscar una audiencia más amplia y multiplataforma.
Una PC con Windows para la sala de estar
La próxima consola de Microsoft tiene como objetivo fusionar la accesibilidad de los juegos de consola con el ecosistema abierto de una PC con Windows. Según un informe detallado de Windows Central, el hardware contará con una interfaz optimizada para TV superpuesta a un sistema operativo Windows completo.
Los usuarios podrían optar por permanecer dentro del tablero tradicional de Xbox o salir a un entorno familiar de Windows.
Una arquitectura tan abierta permitiría a los jugadores instalar lanzadores de juegos de PC de la competencia como Steam, Epic Games Store y Battle.net. Una medida como esta otorgaría acceso a una amplia biblioteca de títulos de PC, incluidos los de su rival Sony, directamente en una Xbox.
El nuevo dispositivo también mantendrá compatibilidad nativa completa con versiones anteriores, ejecutando juegos de la Xbox, Xbox 360 y Xbox Series X|S originales.
Mientras aún está en desarrollo, la presidenta de Xbox, Sarah Bond, confirmó recientemente el compromiso de la compañía, declarando: “Estamos 100% pensando en fabricar cosas en el futuro. Tenemos nuestro hardware de próxima generación en desarrollo. Hemos estado analizando la creación de prototipos, designing.”
Derribando el muro de pago multijugador
En una medida que cambiaría un modelo en el que fue pionero hace dos décadas, el plan actual de Microsoft incluye eliminar la tarifa por el modo multijugador en línea en su próxima consola.
Desde el lanzamiento de Xbox Live en 2002, una suscripción paga ha sido una piedra angular de la experiencia multijugador de la consola, una práctica posteriormente adoptado por Sony y Nintendo.
Eliminar este muro de pago es una consecuencia lógica, aunque dramática, de la nueva identidad similar a la de una PC de la consola.
Crearía una experiencia confusa para el usuario cobrar por el acceso en línea a un juego propio de Xbox mientras que un título lanzado desde Steam en la misma máquina lo ofrece de forma gratuita.
Tal cambio alinearía a la consola con la expectativa de larga data. de juego gratuito en línea en el mundo de los juegos de PC, lo que podría brindarle a Xbox una importante ventaja competitiva.
El mandato del 30% impulsa una nueva estrategia
Impulsada por un nuevo mandato del 30% de ganancias de Redmond, la división Xbox está experimentando una transformación fundamental.
Ese objetivo financiero agresivo es la fuerza principal detrás del giro que se aleja de la exclusividad del hardware y se acerca a un mercado más competitivo. Plataforma orientada a servicios. Para ponerlo en contexto, S&P Global Market Intelligence estima que el margen de beneficio promedio para la mayoría de los desarrolladores de juegos está entre el 17 y el 22 por ciento.
Lograr un margen del 30% es una hazaña típicamente reservada, como lo expresó el analista de S&P Neil Barbor,”un’editor que realmente está acertando'”.
La intensa presión del liderazgo corporativo ayuda a explicar el reciente cambio público en la filosofía de Xbox.
Presidente de Xbox Sarah Bond calificó recientemente de obsoleto el modelo tradicional de bloquear contenido en un solo dispositivo y comentó:”Los juegos más importantes del mundo están disponibles en todas partes… la idea de bloquearlo en una tienda o en un dispositivo es anticuada para la mayoría de las personas”.
Su estrategia se hizo tangible con el reciente anuncio de que Halo: Campaign Evolved, una nueva versión completa de la icónica primera entrada de la franquicia, se lanzará en PlayStation 5.
Al traer su joya de la corona frente a una plataforma rival, Microsoft está indicando que las ventas de software en cualquier dispositivo son ahora la prioridad.
Un futuro abierto con un costo humano
Para los jugadores de consola acostumbrados a una experiencia simple, plug-and-play, la perspectiva de un sistema abierto más complejo presenta tanto oportunidades como riesgos.
Si bien el acceso a más juegos es un beneficio claro, ya que garantiza una experiencia fluida, Una experiencia de sala de estar estable y segura en una máquina basada en Windows será un desafío técnico importante para Microsoft.
Sin embargo, el costo humano de este giro estratégico ya es evidente. Un incesante impulso hacia la rentabilidad ha estado vinculado a una serie de dolorosas acciones corporativas. Desde que adquirió Activision Blizzard, Microsoft ha eliminado más de 11.500 puestos de trabajo en su división de juegos, cerró estudios enteros e implementó múltiples aumentos de precios para su servicio Game Pass.
Esas medidas generaron fuertes críticas de la ex presidenta de la FTC, Lina Khan, quien dijo:”La adquisición de Activision por parte de Microsoft ha sido seguida por importantes aumentos de precios y despidos, lo que ha perjudicado tanto a los jugadores como a los desarrolladores”.
El director ejecutivo de Microsoft, Satya Nadella, abordó la agitación internamente y describió los despidos como una evolución difícil pero necesaria.
En un memorando, afirmó en julio:”Este es el enigma del éxito en una industria que no tiene valor de franquicia”. La transformación en curso hace que Microsoft apueste su futuro en los juegos no a ganar una guerra de consolas, sino a construir una plataforma tan abierta que ya no la necesite.